The Last of Us y sus influencias cinematográficas.
- Guille Reviewer
- 11 oct 2020
- 5 Min. de lectura
Después del cine, los videojuegos son mi segundo gran hobby. Obras como Undertale, Final Fantasy VII o The Last of Us me han marcado mucho más que muchas películas que haya visto, y es por eso que siempre he querido analizar alguno de ellos, pero al no ser ningún gran conocedor de los aspectos técnicos de los videojuegos siempre me ha dado un tanto de respeto hablar en profundidad de alguno de ellos.
Pero con The Last of Us es diferente, porque casi parece una película, y es por eso que hoy voy a hablar de él, de la obra de Naughty Dog y como bebe de diferentes obras cinematográficas para crear el mejor videojuego de la pasada generación.
Estamos hartos de películas y videojuegos de zombies, lo sé, es uno de los subgéneros más explotados de la industria, con un sin fin de obras, tanto cinematográficas como interactivas.
Pero con The Last of Us es diferente, consigue coger lo mejor del subgénero para crear una obra magna y de absoluto culto.

Podríamos decir que The Last of Us es una obra al estilo Tarantino. Neil Druckmann y Bruce Straley, los principales creadores del juego, han dicho en varias entrevistas que se han visto influenciados por grandes directores y obras del medio. Y mucha gente ha catalogado a esto de plagio, pero como pasa con Quentin, yo no lo veo así, veo más un homenaje por parte de los creadores y una utilización carismática para mostrar-nos la gran cultura que los creadores poseen.
La introducción y los créditos del videojuego es una clara referencia a, El Amanecer de los Muertos, una de las mejores cintas de zombis de la historia, para mí claro.
Por otra parte, tanto en el estilo como la narrativa vemos claros guiños a otros filmes muy conocidos.
La idea de cargar con el peso de un menor no es nada novedoso, lo hemos visto en otros videojuegos como The Walking Dead, o en películas como La Carretera, protagonizada por Viggo Mortensen.
Pero en ninguna de las dos obras se trata de la forma que se trata en The Last of Us. Joel es un hombre traumatizado que quiere dejar su pasado atrás, y hacerse cargo de una chica es difícil para él, y es por eso que su relación tarda en ser afectiva y se desarrolla lentamente y de una forma maravillosa y realista.
Por otra parte, el recurso narrativo de la cura del virus no es nada novedosa tampoco, y se ve claramente cuando lo comparamos con la cinta de Will Smith, Soy Leyenda.
Pero como he dicho anteriormente, esto no es nada malo, ya que Naughty Dog sabe utilizarlo perfectamente a su favor para crear una obra única y desbordante en su carisma.
Y aquí es donde entra la más clara influencia cinematográfica de los creadores.
Si hay que destacar algo por encima de todas las cosas buenas que tiene The Last of Us, es su estética y arte, y eso se lo debe a gran parte a obras como No es País Para Viejos, 28 días después o la influencia más clara de todas, Hijos de los Hombres.
Hijos de los hombres es una obra violenta en su exposición, con cámara en hombro y largos segmentos en plano secuencia para que te adentres en la acción y vivas la escena casi en primera persona. Y eso ocurre también en The Last of Us, que se adueña de esa estética gris y esos planos y escenas tan característicos del filme para usarlos a su favor, sobre todo en uno de los aspectos más importantes que poseen los videojuegos, su jugabilidad.

The Last of Us trata a la jugabilidad con un uso muy violento, sobre todo en las armas. Las balas son ridículamente escasas, y no solo eso, sientes el poder destructivo de las armas, porque tendrán pocas balas, pero su fuerza es realista y puede matar con tan solo 1 o 2 disparos.
Y este realismo también se ve en los zombis, aunque sea difícil mostrar realismo en unas criaturas ficticias. Literalmente hay un tipo de infectado que te mata de un solo golpe, y eso crea un realismo realmente terrorífico que te pone en tensión en todo momento.
Los enfrentamientos contra los muertos vivientes sean muy tensos, al igual que los que hay contra los humanos. El juego te asfixia, a Joel le tiembla el pulso y puedes fallar balas cuando tienes la mira bien apuntada. Y eso al final se refleja en el jugador, por lo menos a mí me pasó, porque a cada bala fallada o golpe brutal del enemigo, mi nerviosismo y temor subía, y se me hacía más complicado apuntar con el joystick y disparar al objetivo.
Toda esta jugabilidad consigue que el juego se sienta realista y te internes en la historia. Todos los escenarios están perfectamente construidos para que puedas ser sigiloso y evitar a los enemigos, porque podrás ir a lo loco y acabar eliminando a todos los zombis, pero al acabar sientes una victoria un poco vacía, ya que seguramente te quedes en los más bajos recursos. Y eso hace de este juego una excelente obra interactiva, ya que indirectamente sabe decirte que es lo mejor que puedes en un nivel o escenario, aunque a veces sea a base de múltiples intentos.

Y esta asfixiante jugabilidad se junta con una utilización de recursos todavía más tensa. Naughty Dog sabe usar perfectamente los recursos que dan a tu disposición, son siempre los que necesitas pero nunca te dejan seguro.
Por otra parte, en algunas partes del juego, The Last of Us parece una película de Quentin Tarantino, ya que utiliza largos segmentos donde no ocurre nada, simplemente conversaciones, para crear tensión, para decir-te “esto está demasiado tranquilo, aquí va a pasar algo”, y al final no siempre acaba así y te deja un poco paranoico, porque al final y al cabo estas en un mundo post-apocalíptico.
El desarrollo de los personajes es lento, y Joel y Ellie no se convierten en mejores amigos de una escena para otra. Pero eso no es malo, ya que consigue que empatices con ellos, te preocupes por su futuro incierto y defiendas las decisiones que estos toman.
Todos los personajes son clichés, pero a la vez se deconstruyen para mostrar que esta historia es diferente y original.
No quiero hablar mucho de la historia para evitar spoilers, pero no puedo acabar este análisis sin hablar de la estructura de la obra.
The Last of Us se divide en estaciones, y este recurso me parece simplemente magnífico. Consigue que la obra se sienta más larga y realista en el desarrollo. Y el capítulo de la estación de invierno, joder, esa parte es historia del arte.
La obra de Naughty Dog parece una película interactiva, utiliza muchas escenas cinematográficas, pero no creo que eso sea malo, al contrario creo que consigue que disfrutes mucho más de la historia y sus personajes.
Como he dicho no quiero hacer spoilers, y se me hace muy difícil no hablar del sin fin de escenas memorables que posee el videojuego, incluyendo el final, que por dios, vaya final. No es que me dejará triste o llorando, me dejó muy jodido y tocado, y si sabéis cuál es sabréis por qué.
The Last of Us fue el primer videojuego que me abrió los ojos para ver al medio desde una perspectiva diferente, para darme cuenta de que esta industria era más que mero entretenimiento y se podía considerar como una arte más.
Estaré siempre eternamente agradecido a Naughty Dog para romper con las tradiciones e innovar para llevar al mercado un juego que ha cambiado completamente la industria. Jugad-lo y descubrid un videojuego que os aseguro no os dejará indiferentes.

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